Las olas que se acercan sin descanso hacia la orilla guardan entre su ágil y revoltosa espuma innumerables instantes, décimas de segundo, capturas de las efímeras obras de un arte abstracto, las esculturas de mar.
Desembarcando en la Primera de El Sardinero
Mañana gris de julio. Las nubes de lluvia acechan y la playa, vacía, esperando días mejores.